July 17, 2017
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Cuando una persona está estresada, el cuerpo libera una hormona llamada corticotropina para controlar el estrés y este proceso también se da en la placenta durante el embarazo; cuando el estrés persiste durante mucho tiempo, la concentración de la hormona cortisol aumenta entrando así en pequeñas cantidades al líquido amniótico generando un mayor crecimiento del feto; en algunas situaciones, este aumento de crecimiento puede llevar a mejorar las posibilidades de supervivencia en caso de nacimiento prematuro, pero también puede suceder que esta excesiva aceleración de crecimiento, afecte una apropiada maduración de los órganos del feto.
Los psicólogos sugieren que pese a lo inevitable del estrés durante el embarazo, en caso de ser prolongado se busque el debido apoyo para preparar a la madre en el establecimiento de un vínculo seguro con el bebé, que contrarreste los posibles efectos negativos del estrés sufrido por los dos.
La evaluación del nivel de estrés puede realizarse mediante pruebas de cortisol en saliva o, a través del registro de la actividad eléctrica cerebral con la técnica de mapeo sin consecuencias para el feto, apoyada en inventarios psicológicos especializados.
University of Zurich. «Too much stress for the mother affects the baby through amniotic fluid.» ScienceDaily. ScienceDaily, 29 May 2017. <www.sciencedaily.com/releases/2017/05/170529090530.htm>.